
Del blanco al negro... tanto espectro. Mezclando luces y sombras de una forma metódica y libre. Saltando de la oscuridad exterior al sosiego de mi propia luz. Un poco perdida, huyendo de falsos colores, lo quiero todo puro. Blanco o negro pero puro.
El fotógrafo transforma parte de la vida en materia, materia con esencia propia. El que observa sin embargo, transforma esa forma sustancial en vida, por medio de su imaginación. Os animo a alcanzar las realidades que yo ya alcancé.